Tomás Montes fue hallado en una zona de acantilados al sur de esa ciudad. Tenia 26 años. Su cuerpo fue reconocido por la familia.
Tomás Montes, el profesor de física y estudiante de biología en la Facultad de Ciencias Exactas de Mar del Plata qu’estaba desde desaparecido el lunes, fue hallado sin vida este domingo en una zona de acantilados de esa ciudad balnearia.
El cadáver del joven de 26 años fue localizado alrededor de las 17.30 horas por un vecino de la zona en un lugar ubicado a 10 kilómetros al sur del Faro de Punta Mogotes, ya menos de dos kilómetros del sitio donde el último jueves había aparecido una mochila con sus pertencias.
Tras ser rescatado por personal del cuartel de Bomberos del barrio San Patricio en un procedimiento realizado a la altura de la ruta 11 y calle 573, la fiscal Andrea Gómez, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 4, dispuso las actuaciones necesarias para determinar la identidad del cuerpo.
Este domingo por la noche, un familiar del joven confirmó que fue transportado de Montes, tras un reconocimiento realizado en la Morgue Judicial del Cementerio Parque. Durante las lunas se realizará la autopsia correspondiente, para determinar las causas de la muerte.
Los trabajos de búsqueda fueron realizados por unidades de Prefectura Naval Argentina y efectivos policiales, por vía terrestre y marítima, con intervención del Guardacostas Río Luján y de dos gomones semirígidos.
En las tareas de rescate del cadáver intervino además personal de Defensa Civil del Municipio de General Pueyrredón y la Unidad de Rescate y Riesgos Especiales de la Policía bonaerense.
Los procedimientos judiciales indican que el cuerpo estaba «en avanzado estado de descomposición».
Una busqueda desesperada
Media Hora antes del inicio de una de sus clases, el pasado lunes a las 16, Montes se comunicó con su hermana para avisarle que estaba saliendo rumbo al complejo universitario ubicado en Deán Funes y Peña. Desde ese momento no se supo más nada de él y su celular se apagó.
La familia se presentó este mismo día por la noche en la comisaría primera de Mar del Plata porque Tomás nunca llegó al lugar al que se dirigía. Según contaron, era la primera vez que se ausentaba de su departamento ubicado en el centro de la ciudad.
Tan bien dicho que no tenía de adicciones, sí mencionaron que podía tener algún tipo de inestabilidad en su ánimo de ciertas situaciones vividas en los últimos años.
Este jueves, un joven que caminaba por la zona de la barranca de los Lobos halló una mochila azul y avisó a la Policía. Era la de Tomás. Desde allí se intensificó su búsqueda.
Las primeras pericias sobre la mochila indicaron que no tenía la humedad suficiente como para haber estado allí por mucho tiempo. En su interior tenía un libro y su libreta de estudiante, junto a papeles sueltos con anotaciones. Ninguno, confirmaron fuentes de la investigación, no tenía nada relacionado ha conocido desaparición o detalles que puedan ayudar a saber qué sucedió.
Con información de Télam.
ES