IA dia Mundial del AguaEl 22 de marzo marca la apertura de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua, en Nueva York, que cerrará el 24 de marzo. Este encuentro es crucial: por primera vez en medio siglo, los Estados se reunirán bajo los auspicios de las Naciones Unidas para discutir los desafíos del acceso al agua y temas relacionados con el saneamiento y la preservación de los recursos hídricos.
El agua es el gran problema del siglo XXImi siglo. Aún hoy, una persona de cada cuatro en el mundo no tiene acceso a agua potable y una persona de cada tres tiene baño privadosegún datos de 2021 de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Sin embargo, estamos en 2023… ¡y las Naciones Unidas reconocieron el acceso al agua y al saneamiento como un derecho humano básico en 2010! Incluso en Francia continental, la falta de conexión de agua es un desafío para 400.000 personas en viviendas precarias. En los territorios de ultramar, la situación es aún más alarmante.
Las primeras víctimas son las más vulnerables. El acceso al agua y al saneamiento es un tema vital para 180 millones de personas en zonas de conflicto o en el contexto de una crisis humanitaria. Las mujeres están especialmente expuestas, y los niños no se salvan: para estos últimos, el riesgo de morir por una enfermedad relacionada con el agua es, según Unicef, veinte veces mayor que el de morir durante un conflicto armado.
La escasez de agua provoca desplazamientos forzados de población, que pueden provocar tensiones agudas: los conflictos entre poblaciones de pastores y agricultores sedentarios en Sudán del Sur, en la zona del Sahel o en Afganistán ilustran esta realidad.
Progreso demasiado lento
Además de los desafíos del acceso al agua potable, existen muchas presiones sobre nuestros recursos hídricos: contaminación, sobreexplotación, agricultura intensiva, desechos, acaparamiento y cambio climático. Esta crisis está provocando la multiplicación de inundaciones y sequías cada vez más intensas, incluso en Francia, donde los pueblos se ven privados de agua corriente. Sin un verdadero sobresalto por parte de la comunidad internacional, vamos directos contra el muro: la mitad de la población mundial sufrirá escasez de agua en 2050, indica el Informe mundial de las Naciones Unidas 2020 sobre el desarrollo de los recursos hídricos.
El progreso es demasiado lento: según este informe, los Estados deben cuadriplicar sus esfuerzos para lograr elObjetivo de Desarrollo Sostenible 6, que tiene como objetivo, para 2030, la gestión sostenible del agua, así como el acceso universal al agua potable y al saneamiento. Desafortunadamente, el agua es un punto ciego en la diplomacia global.
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