Retuvieron en Ezeiza ciudadano ruso buscado por Interpol y será expulsado del país

Naciones Unidas ciudadano de nacionalidad rusa, sobre el que pesaba una alerta naranja de Interpol, Si es detenido en el aeropuerto de Ezeiza, será expulsado del país. Llegó en uno de los vuelos que venían cargamentos de mujeres embarazadas presuntamente para parir en suelo argentino y conseguir la ciudadanía.

Valentin Kazantsev, de 38 años, quien ingresó al país el pasado viernes en vista de Ethiopian Airways, cuando saltó alerta en los controles fronterizos del Aeropuerto Internacional de Ezeiza.

Por el momento, la Policía de Seguridad Aeroportuaria lo retuvo y decidió someterse a un vuelo para que regresara a Rusia. Sin embargo, el hombre adujo un fuerte dolor de panza, por lo que no pudo abordar el avión. Minutos después, una abogada ingresaría a habeas corpus para definir si era procedente o no negarle el ingreso al país. Por esta razón, la deportación se retrasa.

Este sábado por la noche, el juez federal Luis Armella (del tribunal de Lomas de Zamora) dictó que el ciudadano ruso debe abandonar el país cuanto antes. Según confirmó un Clarín fuentes de migraciones, se iría recién mañana lunes por la noche, en el próximo vuelo de la aerolínea etiop rumbo a addis abeba.

“Su situación no es irregular, es que no está ingresado en el país porque su pasaporte tiene una alerta de Interpol. Lo que no se entiende por qué Interpol Rusia lo dejó sucio de su país«, agregación.

Según Interpol, una alerta naranja señala aquellas personas que representan una grave e inminente para la seguridad pública.

Kazantsev llegó al país en medio de la polémica por el ingreso de ciudadanas rusas a la Argentina, que llegan con embarazos avanzados to parir en suelo nacional y conseguir la ciudadania. Este trámite les permite tener un pasaporte mucho más robusto y que les autorice a vivir en Europa o hasta sacar la visa de Estados Unidos. His destinos que ponen muchos trabas a los ciudadanos de dicho país a causa de la guerra desatada por Rusia y Ucrania.

Esta semana, la Policía Federal desbarató una banda que operaba en el país y cobraba a ciudadanas rusas entre 20 y 35 mil dólares por allo el servicio para viajar a la Argentina. Según confirmaron fuentes policiales, utilizaron documentación trucha para agilizar las nacionalidades en tiempo «record».

Tan bien a priori la llegada de Kazantsev y las embarazadas no tienen nexos en común, desde migraciones descreen y sospechan. «El hombre dijo además que su mujer y una hija ya habían ingresado al país. Acompañando a estas mujeres están llegando personas con alertas de Interpol«, explicó a Clarín desde migraciones. El hombre demorado además llegó en el mismo vuelo que trajo a unos 80 ciudadanos de la patria de Vladimir Putin, 16 de ellas embarazadas.

El jueves, seis mujeres habían sido demoradas en migraciones por las inconsistencias presentadas ante las autoridades aeroportuarias sobre los motivos de su ingreso al país. Es que todas ellas habían afirmado que venían a hacer turismo. Cuando se les preguntaba a qué destinos, o en qué hoteles se alojarían, ni idea tienen. Buffer contaban con vuelos de regreso.

Todas presentaron habeas corpus y hasta habían pedido refugiarse. Negaron haber mentido en sus informaciones de ingreso, como que no tenían ticket de regreso. Recibieron además asistencia consular de la embajada rusa en Buenos Aires, que presionó par que les habiliten el ingreso.

Finalmente, durante el día jueves las seis fueron habilitadas para ingresar.

Al final del día, Migraciones y la Policía Federal realizó un operativo conjunto en hoteles del centro de la ciudad para saber si algunos de los ciudadanos que llegaron esta semana estaban en las direcciones que habían declarado al hacer el ingreso al país. De 30 rusos que fueron a buscar, solamente encontraron a ocho.

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