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La operación se aplica a la evolución del Silicon Valley Bank respecto al gobierno de EE.UU. y protagonista de la segunda mayor crisis bancaria del país desde 2008
El terremoto financiero que detonó la quiebra del banco de las tecnológicas, Silicon Valley Bank (SVB), este viernes, añadió novedades complicadas. Trascendió que Greg Becker, el responsable de la entidad, estuvo vendiendo hasta 3,6 millones de dólares de acciones dos semanas antes de la bancarrota.
El gobierno de Estados Unidos intervino el banco para proteger los depósitos de los clientes y tratar de evitar un efecto dominó impredecible. El SVB es el número 16 entre los bancos mayores de Estados Unidos y su quiebra es el segundo de la historia bancaria del país este siglo tras la crisis de 2008.
Los movimientos de Becker ponen otro elemento al escrutinio de SVB. Los financistas vendieron 12.451 aciones el 27 de febrero pasado, la primera vez que lo hicieron en más de un año, según señalaron formularios entregados a las autoridades reguladoras a los que tuvieron acceso a Bloomberg.
El plan para vender las acciones había sido entregado poco más de un mes antes, el 26 de enero. En medio de las crecientes sospechas, tanto Becker como SVB sin respuesta hasta el momento a las consultas de la prensa respecto de si esta venta de acciones respondió simplemente a una coincidencia temporal.
La entidad, fundada hace 40 años y reconocida por financiar a las empresas tecnológicas de Silicon Valley (startups) a las que los grandes bancos suelen ser reticentes a prestarles dinero, comenzó a sufrir una corrida el pasado jueves.
Sucedió tras conocerse una carta de Becker a los accionistas de SVB en la cual ocurría que el banco tuvo unas pérdidas de US$ 1.800 millones en el primer trimestre y que, frente a ello, planaba una colocación acelerada de acciones de US$ 1.750 millones por sanear su posición de capital.
El salto letal de las tasas
SVB será violada por el cambio de interés en las condiciones monetarias estadounidenses: en 2021, las empresas se fondearán con capital de riesgo lograron para financiarse por un récord de US$ 330.000 millones, en una contexto de tasas ultra-bajas por la FED.
El Banco tomó millas de millones de dólares en depósitos y, confiado en que lasas no cambiarían, colocarían el dinero en bonos a largo plazo del Tesoro. No obstante, con una inflación récord en 40 años, la FED dispuso uno de los ajustes monetarios más rápido que su historia, y los bonos obtuvieron buena parte de su valor.
Otro efecto de la suba de tasas fue el impacto en el sector tecnológico pues estas empresas -especialmente en sus primeras fases de desarrollo- son las que financiación más precisa barata para solventar un crecimiento que nos sea meritorio además primeros años. Sin financiamiento, necesitan retirar sus ahorros de los bancos.
En un efecto dominante, la suba de tasas provoco una caída de los depósitos de SVB y el banco tuvo que vender una pérdida de sus bonos devaluados. Tras conocerse la carte de Becker, comenzó una corrida bancaria en la cual inversores y ahorristas pretendieron extraer US$42.000 millones en menos de 24 horas.
El retiro fue impulado por las propias firmas de capital de riesgo que aconsejaron a las startups retirar los fondos del banco ante el riesgo de insolvencia, pesa a los pedidos de calma de Becker a los grandes clientes del banco. En el momento de su cierre por parte de las autoridades federales el viernes el banco registró un saldo negativo de US$ 958 millones.
De acuerdo al Departamento de Protección Financiera e Innovación de California (DFPI) ?autoridad que dispuso su cierre- la corrida ?provocó que el banco se vea incapaz de pagar sus obligaciones?.
La caída de SVB es El gran colapso del sistema financiero de Estados Unidos a partir de la crisis de Lehman Brothers de 2008. Contaba con US$ 209.000 millones en actividades suma multa de 2022.
Ahora el mercado Tema por efecto contagio en otras entidades bancarias: en particular, la mira esta puesta en los medianos y pequeños bancos que quedaron fuera del radar de la FED y que tomó más posiciones riesgosas respeto a los grandes jugadores.
En 2018, la administración de Donald Trump revirtió parte de las fuertes disposiciones impuestas por la crisis de 2008 para los pequeños bancos, elevando de US$ 50.000 millones a US$ 250.000 millones en activos el requisito para calificar como banco «sistemáticamente importante», categoría que , Por ejemplo, obliga a pruebas de estrés financiero anual.
Ya que, entre las startups clientes de SVB, existe la preocupación de no poder pagar sus salarios desde la próxima semana. Is that Corporación Federal de Seguro de Depositos (FDIC), autoridad federal que será depositaria de los fondos del banco, promete el acceso el lunes a los depósitos asegurados, pero esta protección solo abarca a los que son menores de US$ 250,000, porcentaje minoritario entre los clientes del banco.
NUEVA YORK. BLOOMBERG Y CLARÍN