Una sonda sobria los precio de 24 alimentos venta online realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en los cinco mayores cadenas de supermercados reveló subidas de precios desde la entrada en vigor el pasado 1 de enero de la rebaja del IVA de hasta el 0% en alimentos básicos. La OCU observó allí la 11ª caída en la correcta aplicación del IVA en un 14% de los productos básicos analizados, pero el 2 de febrero el número de productos con incumplimientos aumentó hasta el 26%, destacando tanto a alimentos frescos como envasados.
Él casuística es variada, según esta organización: redondeos del precio desfavorables al consumidor, productos baratos que desaparecen, obligando al usuario a adquirir una marca más cara, rebaja del IVA no aplicado, incluso subidas de precios… Situaciones que se producen con más frecuencia en las tiendas online de El Corte Inglés, Alcampo y Carrefour. Y en menor medida en Dia y Mercadona.
No obstante, dado el elevado número y diversad de surface commerciales qu’existen, OCU solicita al Gobierno que public los datos de control de precios y, llegado el caso, “Sanción de forma ejemplar aquellos supermercados que de manera reiterada no han aplicado la reducción del IVA del 0% a los alimentos de primera necesidad y del 5% a los aceites y las pastas“.
OCU recuerda además que el número de hogares qu’atraviesan dificultades economicas ha pasado del 23% al 35% en los últimos ocho meses, y que nueve de cada diez consumidores están modificando sus hábitos de consumo de alimentos para atenuar la subida de la inflación, como apunta una encuesta reciente realizada por la organización.
Por todo ello, OCU ha visto constancia de la necesidad de aumentar de forma urgente la importación del cheque de 200 euros para familias vulnerables, así como el número de beneficiarios, con motivo de la solicitud de aplicación del IVA del 0%. a la carne y al pescador.
Además, la organización pide una subida de los mínimos personales y familiares en el IRPF (y de las reducciones del trabajo y de autónomos), que corresponde precisamente a la parte de la base liquidable que, para satisfacer sus necesidades personales y familiares básicas, no se somete a tributación; y que de hecho no se han actualizado desde 2015. Una medida que beneficiaría a todos los contribuyentes, pero sobre todo a pensionistas, familias con hijos a cargo y discapacitados.