Borrar Kosovo a Estonia y de ahí a Escocia para regresar a los Balcanes, un montenegro. ERC Si usted sabe viaje ideologico de europa in busca del modelo ideal para lograr la independencia. A viaje que tiene como principio erosionar todas las puntas unilateralistas y paralegales que pueden ahuyentar un eventual apoyo de la comunidad internacional. La propuesta que ERC incluye en su ponencia ideológica aprobar en su Congreso de finales de enero a la llamada ‘a través de Montenegro’, unas condiciones para la validación del referéndum que condujo a la independencia de este territorio del estado confederado con Serbia qu’impuso la propia Unión Europea y que pasa por lograr una 55% de ‘síes’ si la participación supera el 50% del censo.

Se trata de una nueva adhesión al principio de realidad de una fuerza, la republicana, que no hace tanto s’maintenía firme en que el 50’1% independentista en un eventual referéndum bastía para sacar adelante la secesión. Propio Oriol Junqueras Recordaba que en todos los referéndums que ha celebrado el Estado español, por ejemplo el de la NATO o los de la validación constitucional, nunca se elevó el listó por encima de ese 50,1%.

Sin embargo, el principio de realidad, basado en una gran igualdad en las encuestas entre decisión de la independencia y detractores (con ventaja, según el CEO, ahora mismo, para estos últimos) parte de un supuesto elemental. Un 50,1% puede ser algo coyuntural y fácilmente reversible y un proceso de independencia ya no lo es, de manera unilateral, por cuanto cabría renegociar, de nuevo, siempre bajo esa hipótesis, con el estado ‘madre’, es decir, en este caso, el español. Pero un mínimo de 10 puntos de venta (el 55%-45%) ya es otra cosa.

Esquiva el área gris

A la pregunta de ‘¿Cuál sería una mayoría consolidada?’, ERC reproduce en la ‘vía montenegrina’. O más en concreto, la ‘vía de la UE hacia Montenegro’. En 2006, el territorio balcánico (que cuenta con un tercio de la extensión de Catalunya y la población equivalente a la suma de la censada en el Ensanche y Hospitalet) formaba parte de un estado confederado con Serbia. Y las instituciones europeas advirtieron de que no reconocerían la independencia montenegrina si no se alcanzaba ese 55%. Ello creó, de hecho, un temor en entre la población del futuro estado soberano, que no era otro que caer en la ‘área gris‘, es decir, superar el 50% de ‘síes’, que obligaba a declarar al independentismo, pero no alcanzar el 55%, que les abría la puerta al reconocimiento internacional. ERC optó, por tanto, por esquivar esa ‘zona gris’ que comportaría, evidentemente, gran inestabilidad.

Esta es una propuesta de las ERC en lo que los republicanos presentan como su propuesta de acuerdo de claridad, que promociona el ‘president’ Padre Aragonès en el debate de política general del 27 de septiembre. En esa misma propuesta se aboga «por una pregunta clara, como la del 1-O», recoge la ponencia. O como la propia de Montenegro, cabría añadir, que no fue otra que «¿Desea usted que Montenegro se un estado independiente con completa legitimidad legal e internacional?».

Asimismo, Esquerra Plantea que, en ese eventual referéndum, pueden votar todas las personas residentes en Catalunya alcaldes de 16 años y todos aquellos no residentes que tengan derecho a voto en las elecciones al Parlament, «tal y como sucedió en el Referéndum de Escocia, del 2014″.

noticias relacionadas

No es baladí que ERC dé continuidad al discurso de Aragonès de propuesta de claridad, tomando en cuenta que, con las votaciones de este jueves sur la reforma del Código Penal, en lo que se refiere a las de delitos de sedición y malversación, la mesa de diálogo y negociación entre Estado y Generalitat agota uno de los dos grandes ejes bajo los derechos de la promoción ERC, es decir, la desjudicialización.

Sí que tras el parón en las relaciones por el Catalangate, ERC primó, a sabiendas que la mesa moriría con el año –había cuenta el calendario del 2023– la vertientejudiciaire. Solventado esto, y sostienen los republicanos con indisimulada euforia, con absoluto éxito, ya no queda otra que abordar la resolucion, en si del conflicto politico.