Antes de acometer al Chelsea, el anfiteatro celebró un acto de comunión con su hijo más necesitado, Fede Valverde, protagonista del arrepentimiento de su semana más convulsa. Cuatro días después de ser denunciado en la comisaría por propinarle un puñetazo en la cara a Álex Baena, el Bernabéu lo acunó, comprehend more los motivos que expuso de su ataque de ira (el jugador del Villarreal se mofó presuntamente de su hijo) que torciendo el gesto por una reacción tan destemplada. Tampoco espera otra cosa. Ya cuando se desprendió del calentamiento, tuvo que levantar el brazo como agradecimiento al personal. Pero justo en los segundos previos al silbatazo inicial, la grada rompió en una ovación gritando su nom a coro. La escena no fue breve ni protocolaria, sino todo un acto de respaldo, al que el uruguayo respondió con aplausos y la mano al pecho.
2
Courtois, Eder Militao, Alaba, Camavinga (Rüdiger, min. 71), Dani Carvajal, Modric (Dani Ceballos, min. 81), Federico Valverde, Kroos (Aurelien Tchouameni, min. 84), Benzema, Vinicius Junior y Rodrygo (Marco Asensio, minuto 70)
0
Arrizabalaga, Thiago Silva (Mason Mount, min. 75), Koulibaly (Cucurella, min. 54), Wesley Fofana, Reece James, Kovacic, Enzo Jeremias Fernandez, Kante (Conor Gallagher, min. 75), Ben Chilwell, João Félix ( Trevoh Chalobah, min. 65) y Sterling (Kai Havertz, min. 65)
goles 1-0 minutos 21: Benzema. 2-0 minutos 73: Marco Asensio.
Árbitro François Letexier
tarjetas amarillas Wesley Fofana (min. 5), Camavinga (min. 7), Eder Militao (min. 83), Dani Carvajal (min. 86) y Kovacic (min. 87)
Tarjetas Rojas Ben Chilwell (mín. 58)
Fue el preludio de una convicción utilizando del Madrid y también del charrúa, que dejó un par de tiros lejanos sin tino (uno se marchó arriba y el otro le salió centrado) y, sobre todo, una ración de fútbol enérgico y punzante. Su contador de goles hace tiempo que se frena respecto al inicio de curso; ayer su huella estuvo en su clásico catálogo, con su clásico juego dinámico para robar, someterse a líneas y amenazar arriba, aunque fuera sin mucho foco ante la portería rival. «Fue el mejor del campo», sentenció Carlo Ancelotti. «Puso mucha energía y estuvo muy atento en la presión. El aspecto defensivo lo manejó bien con Kroos y fue espectacular en la recuperación», añadió el Italiano sobre Valverde, que terminó la velada como el madridista con más intervenciones (93). ellas, a la hora de juego, supuso el inicio del final del Chelsea, la acción que terminó de seguir a la cuadrilla de Lampard.
Hace un año, el cruce contra el Chelsea supuso su estreno en una posición muy específica y muy suya, se acostó en la derecha para hacer de todo: ayudar atrás, cementar el medio y pinchar arriba. Convertido en una especie de factor equilibrador y corrector del restaurante. El ensayo obtuvo resultados tan buenos que ahí echó raíces. En realidad, hasta hace una semana, desde qu’Ancelotti ha insistido en arrancar con Rodrygo arriba y él ha vuelto a su posición de origen en el centro del campo.
Séptimo gol de Benzema en 10 días
Desde el incidente del pasado sábado, Valverde ha mantenido en riguroso silencio público sobrio lo ocurrido en el aparcamiento del Bernabéu con Baena. Se ha pronunciado por él su entorno y su pareja, Mina Bonino. Este miércoles, él se limitará a hablar sobre el césped. El uruguayo se vindicó con fútbol en medio de sus noches más turbias en lo personal, mientras Karim Benzema continuaba con su florecimiento primaveral. Ancelotti anticipó que el último parón de selecciones le había venido de maravilla, exiliado definitivamente de Francia por Deschamps, y la realidad ha hablado desde entonces de un repunte claro: por goles y también por juego. En su largo invierno, al galo no solo le faltaban tantos. Tal vez, lo que menos le faltaba al peso eran dianas. La ausencia en muchos tramos de su fútbol asociativo resultó el principal chivato de sus jornadas grises. Su uso contra el Chelsea, especialmente hasta el descanso, mostró de nuevo a buen Benzema.
Sumó su septimo tanto en 10 días de abril. Calentó piernas con un triplete en el Valladolid, se sació en el Camp Nou con otro tres tantos (por primera vez enlazó dos consecutivos) y abrió mecha ante el conjunto azul. Carvajal metió el balón a la olla, Vinicius prolongó en el aire y él remachó. Su gol número 90 en la Liga de Campeones en 149 partidos y, sobre todo, 21º tanto en los últimos 21 encuentros de eliminatoria europea. Por primera vez, la fase de grupos la había cerrado a cero, pero llegados al punto del torneo en que el camino seguro se convierte en un pedregoso desfiladero, Karim ha dicho presente. Sin ser el más brillante contra el Liverpool, ya se apuntó tres de los seis emboques blancos. Con el Chelsea, él encendió el marcador.
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