Fernando Haddad se dio cuenta de que perdió la percepción que tenía sobre el sector financiero de la presidencia de Brasil. Como hizo.

La actuación del ministro de Hacienda, Fernando Haddad, al frente de la cartera está ayudando a mejorar la imagen del gobierno de Lula da Silva y la del propio presidente de Brasil desde la perspectiva de los mercados.

Encuesta realizada por la firma de investigación Genial/Quaest Research y reproducida por la prestigiosa revista Folha de São Pauloseñala que se ha ido reduciendo significativamente la evaluación negativa del mercado financiero en relación con el Gobierno del Partido de los Trabajadores.

Según la encuesta, que digó entre 94 gerentes de empresas, economicas, analistas y tomadores de decisiones de las mayores casas de inversión de Río de Janeiro y San Pablo, la imagen negativa del gobierno entre el segmento alcanzado, este mes, en el nivel más bajo: 44%. El dato es aún más relevante si se lo compara: en marzo de este año, este índice era del 90% y en mayo del 86%.

Si en marzo el 98% de los encuestados afirmaba que la política económica del país va en la dirección equívoca, esa es la indicación del 53% de los encuestados, dijo el diario.




Ministro de Hacienda de Basilio, Fernando Haddad. Foto: AFP

El trabajo del ministerio

“Esto fue mejorado en el gobierno fue impulsada por el trabajo del ministro de Hacienda. Haddad, que tenía un 10% de valoración positiva de su trabajo en marzo, llegó al 65% en julio”, dijo el director de Quaest, Felipe Nunes, en una publicación en las redes sociales.

Según la encuesta, el 53% de los consultados dijo creer que la economía del país mejorará en los próximos 12 meses, frente al 21% que dijo creer en un empeoramiento. En marzo, esta última porción era del 78%.

Realizada entre el 6 y el 10 de julio, la encuesta Genial/Quaest afirma, sin embargo, que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT) si siendo significativamente rechazado por el mercado financiero, con un 95% afirmando confiar poco o nada en el mandatario. Respecto al expresidente Jair Bolsonaro (PL), ese rechazo es del 82%.

Los datos que se combinan en este efecto son por un lado la caída del costo de vida a 3.1%, por debajo de las metas del Banco Central debido a la gestion de planificacion fiscal que ha venido impulsivo el ministro Haddad. El rigor en esa tarea le ha creado al funcionario interno dentro del partido que lo cuestiona por su pragmatismo y supuesta línea liberal.

Un mercado en Río de Janeiro.  Los precios comenzaron a bajar en Brasil.  Foto: REUTERS


Un mercado en Río de Janeiro. Los precios comenzaron a bajar en Brasil. Foto: REUTERS

El otro efecto de crítica se alimentó de la persistente crítica del presidente contra el titular del Banco Central, Roberto Campos Neto, quien manteniendo el número de intereses en un rango bajo, del 13,75%.

La entidad emisora ​​es independiente y está protegida por una ley. Haddad ha preferido antes que luchar con el Central, generar las condiciones de ajuste que obliguen a una baja de los tipos los que se producirían en agosto próximo.

Este martes, cuando se anunció la tasa de inflación de junio, Lula volvió a arremeter contra Campos Neto: «La inflación está cayendo y pronto, pronto, va a commenzar a caer la tasa de intereses porque el presidente del Banco Central está testarudo, pero ya no tiene más justificativa”, indicó el mandatario en su programa semanal “Conversación con el presidente”.

El líder progresivo pronunció en esos términos pocos minutos antes de que la oficina de estadísticas del gobierno divulgara la inflación de junio, que presentó una caída del 0.08%, el primer resultado negativo del año.

Fuente: ANSA

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