Javier Trias hará a sus 76 años los que muchos en su partido último servicio a la causa. En este caso por la causa de Juntos por Catalunya. Trias es uno de los pocos veteranos de la política convergente de los ochenta que ha sobrevivido a la zozobra del barco del centro derecha nacionalista y ha conseguido, aunque sólo por un mandato, el más difícil de los retos del mundo convergente: la vara de mando del Ayuntamiento de Barcelona. Trias, médico de profesión, lo fue todo junto a Jordi Pujol y luego la pidió que le devolviera la medalla de la capital del país. Ha pasado por todos los territorios y ahora, tras un período de reflexión, intentará recuperar la alcaldía. Estas son las claves de esta apuesta:

La renuncia de Elsa Artadi

El candidato de Trias responde a una emergencia. Cuando Elsa Artadí anunció que dejaba de ser candidato y dejaba la política por problemas de salud mental, Junts encendió las alarmas que ya tenía en ámbar. Artadi sólo mejorará cinco concejales, lejos de los puestos que dan opciones a competir por la alcaldía. De hecho, antes de que Artadi renunciase, en el partido cundían los interrogantes sobre su idoneidad como candidata. Trias apareció al poco tiempo, pesa que él habit dicho por activa y pasiva que su tiempo ya habit pasado y habit superado problemas de salud.

Las condiciones para competir

Antes de volver a las quinielas como alcaldable, Triassic era muchas críticas a la evolución del soberanismo y Convergència. No creía que se lograra la independencia, denuncie la falta de liderazgo y se démarcaba de figuras como Laura Borrás. Criticar duramente a Ada Colau y explicó que hubo un error al crear el PDECat tras CDC. Se dedicaba a colaboraciones con distintos toques pero se alejaban del día a día. Esa era su situación cuando en Junts saltaron todas las alarmas. Y Trias, que siempre estuvo dispuesto a casi todo en el partido, ha terminado dando un paso adelante cons tres condiciones: pactar con quién considerar oportuno, hacer que la lista electoral haya podido mediar -incorporar expedientes profesionales de perfil convergente y mantendrá la columna vertebral del conjunto municipal- y que se imponga la paz interna entre sectores en Juntas. La última de las condiciones no la ha logrado pero la decisión ya estaba bastante tomada.

En las antípodas de Laura Borràs

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Trias es también mensaje en clave interna. Direcciones de bobinado Borrás, presidenta de Junts, difícilmente apoyarían a Trias si votaran en Barcelona. Él representa un espacio político casi a las antípodas del independentismo combativo de izquierdas de algunos de los seguidores de Borràs. Y los que tratan de minimizar el peso de la presidenta en Junts ven con muy buenos ojos que Trias sea la cara visible del partido en Barcelona, ​​​​porque encara el centro derecha pactista de toda la vida, una actitud sensata en cuanto al la independencia, las intensas conexiones con la burguesía catalana y la escasez moderada… De hecho, Trias se ha quejado de que algunos de sus seguidores naturales pasaron a financiar la campaña de Manuel Valls. El exalcalde ha cultivado siempre un perfil dialogante y permeable a izquierda y derecha. Si obtiene un buen resultado, muchos en Junts lo pondrán al servicio de la campaña para minimizar a Borràs.

La carta contra Ada Colau

Junts sostiene que encuestas internas dan a Trias como posibilidad de vender elecciones de mayo. El partido lo presentará como auténtica antítesis de Ada Colau y situará así a ERC y al PSC como partidos cercanos a los ‘communes’. El ‘exalcalde’ también podría expresar la idea de revancha, porque Junts acusó abiertamente a la alcaldesa de mala fe cuando pidió explicaciones a Trias cuando se publicó una supuesta cuenta en el extranjero del exconseller, que resultó ser falsa. Trias sin embargo no ha hecho de ello la explicación por la que dejó la alcaldía tras solo un mandato, y lo ha achacado más bien al desgaste de CDC por la corrupción y el caso Pujol. Junts, pues, intentará juzgar el mapa anti Colau pero con un hándicap: esta bandera la levantarán también otras opciones y, desde el punto de vista de los ‘communes’, los votos que ganaron Trias irán en detrimento de ERC más que de Colau.