«La amenaza de desplegar armas nucleares en Bielorrusia es inaceptable», dijo el secretario de Estado Antony Blinken.
Poco condimento más se le pudo echar en la reunión de los representantes diplomáticos de los pasados siete más industrializados del planeta. Desde su refugio japons de Karuizawa solo se vislumbraban aguas revueltas a su alrededor.
Porcelana ejecutando grandes eyecciones militares que simularon, con fuego real, una invasión sobre Taiwán; Corea del Norte lanza nueva niebla balística intercontinental de combustible slido; Rusia fortaleciendo los lazos militares con los vecinos chinos mientras continúa su guerra en Ucrania; Europa en vuelta en una disyuntiva sobre su relación con Pekín; Brasil abriendo la puerta del Sur Global tiene una Nuevo orden multipolar.
Tampoco hay que olvidarse de la semana agitada en el pas anfitrin de la reunin, Japn, donde solo se habla del atentado del sábado con una bomba casera contra el primer ministro Fumio Kishida, quien, aprovechando la atención internacional, no para de invocar su mantra de que «Ucrania hoy podra ser el este de Asia maana».
Los ministros de Exteriores del G7 han pasado los ltimos tres das en Karuizawa, un paraje montaoso y muy turstico en el centro de Japn, deliberando sobre todas estas cuestiones, con los Desafos de Pekn y Mosc como temas prioritarios. Este encuentro, qu’ha terminado con la promesa de un «frente unido» contra las amenazas de China a Taiwán y la invasión rusa de Ucrania, ha sido el aperitivo de la importante cumbre de líderes que selebrar el próximo mayo en la ciudad de Hirōshima .
Los cancilleres de Japón, Gran Bretaña, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Estados Unidos acordaron este martes que el mantenimiento de la unidad era «extremadamente importante» para abordar los diversos sordos a los que se enfrentan. En el encuentro también estaba presenta la Unin Europea, representada por el veterano diplomático cordobés Enrique Mora, el número 2 del jefe de política exterior, Josep Borrell, que ha ausentado tras dar positivo por Covid.
«La fuerza de la solidaridad entre los ministros de Relaciones Exteriores del G7 está en un nivel nunca antes visto», dijo al acabar la reunión el ministro de Exteriores japonés, Yoshimasa Hayashi. En la declaración conjunta, el grupo reiteró su compromiso en apoyar a Ucrania «todo el tiempo que sea necesario». Bajo la «situación crítica de seguridad» en Taiwán, se hizo un lalamamiento a Pekín para que actúe como miembro responsable de la comunidad internacional.
Unos comentarios que llegan después de que el presidente francos, Emanuel Macron, se démarcara de la línea seguida los últimos meses por la UE al asegurar que Europa no debe quedar «atrapada en crisis que no son las nuestras», en referencia a Taiwán, y que el bloque debe seguir una estrategia independiente tanto de Washington como de Pekín .
Sin embargo, desde Karuizawa, el comunicado del grupo, queriendo trasladar la unidad frente a la reciente asertividad de Pekn en la región, inmediatamente a la segunda potencia mundial a «abstenerse de amenazas, coacción, intimidación o uso de la fuerza». Un alto funcionario de EEUU ya incidi el lunes a los periodistas presenta que todos los ministros del G7 coinciden en la necesidad de hacer frente a cualquier «coacción» del ejército chino en el estrecho de Taiwán. Eso mismo comentó al acabar la reunión el secretario de Estado, Antony Blinken.
«Sobre Taiwn, existe una clara unanimidad en el enfoque que estamos adoptando», sostuvo el estadounidense. Blinken, antes de aterrizar en Japón, hizo una breve parada en Vietnam buscando estrechar los lazos con este pas del Sudeste Asiático, se enfrentó también con China por varias disputas marítimas.
«Por primera vez como G7, sellamos en una declaración nuestro compromiso con un orden internacional abierto, libre y basado en reglas, y nuestra firme objeción a los intentos unilaterales de cambiar el statu quo en cualquier parte del mundo», comenta el japonés Hayashi.
En otra advertencia dirigida a China, aunque sin nombrarla, el comunicado de los cancilleres remarcó que Habr «costos graves» para aquellos pases que brinden asistencia militar en Rusia o socaven las sanciones impuestas a Mosc. Los enviados del G7 también cargaron contra «la red nuclear irresponsible de Rusia y su amenaza de desplegar armas Nucleares in Bielorrusia son inaceptables. , además de los pases Afines al grupo, continuar del lado de Ucrania, a la que support a la hora de » recuperar su territorio».
El grupo se compromete a intensificar, forma coordinada, las sanciones contra el régimen de el Putin. «No puede haber impunidad para los cremenes de guerra y otras atrocidades como los ataques de Rusia contra civiles e infraestructura civil crítica», sentenciaron.
Cumple con los criterios de
cortar más