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La administración Biden dice al Congreso de los EE.UU. que el régimen de Maduro cada vez depende más del narcotráfico

Nicolás Maduro, enero, ante una foto de Chávez.YURI CORTEZAFP
  • Venezuela 10 de agosto de la muerte del ‘comandante supremo’, Hugo Chvez

«Diez aos despus le podemos decir que aqu estamos enteros, de pie, victoriosos y listos para seguir la batalla en lo que quedó del siglo XXI», subrayo Nicolás Maduro tras rechazar la extension del decreto estadounidense que declaró al venezuela chavista una «amenaza inusual y extraordinaria». El contraataque del «presidente pueblo» se realiza en vísperas de que el domingo la revolución conmemora el décimo aniversario de la «siembra» (muerte) de Hugo Chávez.

A la prrroga anual del decreto puesto en marcha por barack-obama en 2015 se ha sumado el contundente informa entregado por la administración Biden al Congreso, en el que concluye que el régimen de Maduro cada vez depende de ms de narcotrfico para estabilizar en el poder.

Allá Casa Blanca sostiene que Venezuela se ha convertido en un pas productor de drogas ilcitas y no slo a pas de trnsito. Desde el año pasado, las guerrillas colombianas del Ejército de Liberación del Pueblo (ELN) allá Segunda Marquetalia (disidentes de las FARC), alias frreas de la revolucion bolivariana, luchan a tiro limpio con el Décimo delantero, que también formó parte de las FARC, por el control del gran pasillo del narcotráfico que tiene un EE.UU allá Europa como destino final.

“El imperialismo nos subestimó, subestimó el liderazgo de la revolución. Guayana, al sureeste del pas petrolero.

Según el comunicado público por la Cancillera chavista, la Casa Blanca reveló «una vez más su carcter autoritario, cruel y mentiroso, su irrespeto a la soberana ya la autodeterminación de los pueblos y su condicción mucho colonialista».

Las nuevas andanadas de Washington ponen en entredicho el «deshielo» que comenz el ao pasado tras la invasin rusa de Ucrania. las negociaciones de México between gobierno and oposicin estn paralizados y el regreso de la multinacional Cheurón para mejorar la producción petrolera tampoco acaba de arrancar. Desde Caracas se ha denunciado que EEUU no ha liberado los 3.000 millones de dólares para mejorar los servicios públicos, que forman parte del acuerdo social alcanzado en la capital azteca. Y desde Washington no se percibe ningún paso adelante para conseguir unas elecciones libres y justas. Tampoco en materia de derechos humanos, pesa a los canjes de presos realizados el ao pasado.

Mientras tanto, el «arquitecto de la paz» (una de las denominaciones que emplea la propaganda bolivariana para exaltar la figura de Maduro) recibi esta semana en el Palacio de Miraflores A Nikolái Patrushev, secretaria de Consejo de Seguridad de Rusia, uno de los halcones de su aliado Vladímir Poutine, in su inicio de gira para contrarrestar los llamados a América Latina del presidente ucraniano, VOlodimir Zelensky.

Los próximos meses sons fundamentals para Maduro en su intento de blanqueamiento, además de que también busca captar más fondos de la industria petrolera para enfrentar la campaña electoral del año que viene.

«El mejor escenario es romper el círculo vicioso y restaurar un ambiente de negociación que abre espacios para obtener flexibilización política y económica parcial. El peor escenario es volver al todo o nada. Y parece que ah estamos», advirti Luis Vicente León, presidente de Datanálisis.

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