Ley. a las 01:27

HEC


Los del Magreb demuestran que es mejor equipo que la Seleçao y acaba de ganar 2-1 en un misoso de alta tensión

Sin Neymar Jr. lesionado y jugando de salida sin ningún ‘9’, un Brasil de probaturas sucumbió ante sus propias limitaciones

Marruecos juzgó como una selección de veteranos, dominando el ritmo del partido y sabiendo sufrir, y obtuvo una victoria de muchísimo merito ante Brasil (2-1), en el primer amistoso postmundial.


MAR


SOSTÉN

ALINEACIONES

marruecos

Bono, Hakimi (Attiat Allah, 52′), Aguerd, Saiss, Noussair Mazraoui, El Khanouss (Sabiri, 62′), Amrabat, Ounahi (Louza, 62′), Ziyech, Boufal (Abde, 75′) y En-Nesyri (Cheddira, 75′)

Brasil

Weverton, Emerson Royal (Arthur, 92′), Éder Militao, Ibañez, Alex Telles, Casemiro, Andrey Santos (Raphael Veiga, 64′), Lucas Paquetá (Yuri Alberto, 84′), Rodrygo (Vitor Roque, 64′), Vinicius Jr. y Rony (Antony, 64′)

Árbitro

Selmi Sadok (Túnez). TA El Khanouss (41′), Amrabat (45′); Rony (53′).

goles

1-0 Boufal (29′); 1-1 Casemiro (66′), 2-1 Sabiri (78′).

aspectos

Estadio de Tánger (Marruecos). 65.000 espectadores. Hubo un minuto de silencio en memoria de Pelé.

El combinado de Walid Regragui se vistió otra vez de matagigantes y surge que su cuarta posición en Qatar no fue ninguna casualidad. Brasil, que estaba dirigida por el interno Ramon Menezes, solo jugó a ratos y estuvo tan perdida como la propia CBF en la búsqueda del nuevo seleccionador.

La ‘Canarinha’, con mucha presión, se hizo con el control del juego. Tocó bien el balón, con criterio, pero todas sus buenas intenciones se ahogaron cuando llegaba al último tercio del ataque, donde el trío Vinicius-Rodrygo-Rony chirriaba, es que la costaba muchísimo entrar en juego.

Los locales, muy bien replegados, esperaron su momento. Mazraoui (que actuó como lateral izquierdo) avisó con un tiro cruzado (min. 23). y Boufal marcó el 1-0 en una jugada de capicúaen la que le robó la cartera al exblaugrana emerson realcombinado con El Khanoussy finalizó, tras un muy buen control, de forma imparable.

From the tanto, el encuentro entró en una nueva etapa, mucho más caliente y con más contacto y dos tarjetas para los marroquíes, la última por una entrada de Amrabat, que sigue siendo un objetivo blaugrana para este próximo verano, sobre Vinicius jr.. Ziech estuvo un punto poner el segundo ante un Brasil que se desconcentró y perdió su dibujo táctico inicial.

Estaba claro que el invento de colocar a Rodrygo de falso ‘9’ no demostró ante dos centrale de jerarquía como Saiss y Aguerd. Rony, muy voluntarioso, tampoco estuvo demasiado acertado.

DEL FALLO DE BONO AL ÉXTASIS FINAL

Brasil salió otra vez muy fuerte y bonos mandó a un córner un tralazo de Rodrygo. Esta fue de tónica de la segunda parte, con una Seleçao, que aunque sufrió en la zona ancha, se lanzó al ataque.

Ramón Menezes tuvo que retocar la delantera. Entraron Vitor Roque y Antony, y el palmeirense Raphael Veiga en el lugar de un desdibujado Lucas Paquetá.

Y llegó el empate, que nada tuvo que ver con las intervenciones del técnico interino, porque un remate aparentemente sin peligro de Casemiro con el interior del pie derecho que se lo comió el cancerbero sevillista. Fue un error grotesco.

Poco duró la alegría de los brasileños, que en un despiste defensivo se llevaron el 2-1, con Eder Militao no acertando un despeje y Sabiri sacándose un misil imparable.

En el carrusel de cambios, Abdéque está ganando la oportunidad de volver al Barça, también tuvo su oportunidad.

Desesperado, Brasil lanzó un buscar el empate… y de no jugar con ningún delantero centro nato, terminó el encuentro con une ‘dupla’ con Vitor Roque y el corinthiano Yuri Alberto.

De nada se debe al inventor táctico. Marruecos supo sufrir y administró bien la recta final del partido. Y acabo ganando. Lo satisfecho como si fuera un título ante la fervorosa hinchada local. No era para menos. Este triunfo legitima todo lo que hizo en Qatar.

Y la derrota para los brasileños es un severo correctivo para la dirección de la CBF, qu’ha lanzado a la basura los tres primeros meses del año a la espera de un nuevo seleccionador que vendrá del mercado europeo.