En el sector del automóvil lo tienen claro. En la electrificación hay que pasar de las palabras a los hechos. España, segundo fabricante de automóviles de Europa, es cola en penetración del vehículo eléctrico y de cero emisiones: 10% del total de las ventas frente al 20% de los medios europeos, una distancia, alerta al sector, aporta continuidad de nuestro país como gran plataforma de fabricación de vehículos. Así se lo ha transmitido la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) al Gobierno durante la junta directiva de la entidad, donde asistieron como nuevo ministro de Industria, Héctor Gómez –en su primera toma de contacto con la patronal del sector–, y la titular de Transportes, Raquel Sánchez.

en el marco del Barcelona AutomovilismoAnfac ha trasladado a los ministros la necessidad «de poner en marcha medidas inmediatas y con carácter urgente en materia de fiscalidad, ayudas directas à la compra y déarrollo de infraestructura de recarga que permiten acelerar las ventas de vehículos electrificados y de bajas y cero emisiones , se apunto desde la entidad. planificar los movimientos puede suscribirse inmediatamente al comprador, y no con un año de demora como sucede en algunas autonomías.

Fuentes de Anfac han trasladado a ABC una “valoración positiva” del encuentro, en lo que definimos como un “encuentro productivo”. No obstante, y en consonancia con la impaciencia de unos fabricantes que ven como las buenas palabras siguen sin concretarse, las mismas fuentes han añadido que de lo que se trata ahora es de “tierra» las promesas que hizo el ministro. “Esperamos que en unas semanas tengamos algo”, apuntan.

Este es, de hecho, el plazo que ha fijado el ministro Gómez para volver a reunirse con Anfac. Al respecto, Gómez avanzó que durante el encuentro de ayer se avanzó en puntos de impuestos y devoluciones, un aspecto este último que señala, junto al precio, como uno de los principales frenos para que el consumidor se pase a lo eléctrico. En cuanto a las ayudas, el ministro ha reconocido que no es admisible que el cobro de las mismas “se prolongue tanto en el tiempo”. Las ayudas deben llegar «mucho antes, casi de inmediato», en el momento de la compra, sino «pierden atractivo», apunta.

Por otra parte, el ministro aseguró que no descartan establecer antes de que acabe la legislatura “líneas de actuación complementaria” que permitan subvencionar la compra de coches con motores térmicos, ayudas ahora limitadas a híbridos y eléctricos. Se trata de una reivindicación clásica del sector, que recuerda la necesidad de renovar el envejecido parque automovilistico español (14 años de media). “Hemos de renovar el parque automovilístico porque el vehículo que está más contaminado es el viejo, y un vehículo nuevo es mucho más sostenible”, expresó durante la reunión el presidente de Anfac, Wayne Griffiths. Las palabras del ministro llegan desde que el presidente del PP propone un paquete de 400 millones de euros en ayudas para la compra de coches, incluidos los de combustión.

Como varios fabricantes, Griffiths registró a los ministros que “la coyuntura ha sido muy mala y no son los mejores años para animar a los ciudadanos y empresas a comprar un coche o un camión nuevo. Por lo tanto, nuestro primer objetivo es recuperar el mercado para mantener el empleo de los dos millones de personas que trabajan en la cadena de valor del automóvil en España“. El mensaje que transmite el sector es claro: los objetos de descarbonización serán compatibles con el mantenimiento de la industria, por lo que se pide más flexibilidad, por ejemplo, en la aplicación de la norma Euro 7 de reducción de emisiones.

Al mismo tiempo, el ministro de Industria se mostró optimista sobre la posibilidad de poder aprobar el segundo Pérdida de Vehículo Eléctrico y Conectado (pérdida de VEC 2) en junio. El segundo paquete de ayudas está dotado con un importe de 1.475 millones de euros, y la principal novedad incluye 837 millones de dólares específicos para la fabricación de baterías para vehículos eléctricos.