El vuelo debe despegar a las 22:45 de este lunes con destino a San Pablo. Pero finalmente se fue después de las 6 de la mañana. El testimonio de los pasajeros.

El vuelo 5804 de Flybondi había iniciado embarque en Ezeiza para aterrizar a las 22.45 de este lunes con destino a San Pablo. Pero no despegó hasta este martes a la mañana. Una situación insólita se dio mientras todos los pasajeros ya estaban sentados en sus asientos.

En el registro del aeropuerto figure el incidente como «pasajeros disruptivos». En el avión había hinchados del Club Atlético Tigre que al parecer habrían impedido que se cerraran las puertas, ante la sin embarque de algunos de los simpatizantes.

«El vuelo demoró su salida por pasajeros disruptivos a bordo. Ante los reiterados pedidos de orden de la tripulación y la imposibilidad de déembarcar a estos pasajeros del vuelo 5804, por protocolo de seguridad la compañía procedió a déembarcar a todo el vuelo para poder identificarlos. Todo este proceso demandeó tiempo que hizo que se reprograme el vuelo para las 06.20 hs del día de hoy», dicen a Clarín desde la aerolinea low cost.

Los hinchas viajaran para ver al equipo este martes contra el San Pablo por la Copa Sudamericana. Pero en el avión no había sólo hinchas de Tigre. Juan Lomanto era uno de los pasajeros del avión y cuenta a este diario la incertidumbre que hubo hasta que el comandante dio la orden de déembarcar.

«Estabamos todos ahí y los hichas sacaron a gritar, a ‘motivar’cerdo faltaban dos compañeros de ellos. Se amotinaron y el avión no salió. Si bien no hubo violencia, al avion lo frenaron. Estuvimos volver horas y media llegar del avión sin saber que iba a pasar. Apareció una sola persona de Flybondi, miró y se bajó. Subió un solo policía (referido a un efectivo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria), que parecía más un hincha que otra cosa. Hasta que nos dijeron que había que bajar», detalle.




La foto que publicamos en Twitter las hinchas del club Tigre.

Juan viajaba a Brasil por trabajo, con otros colegas periodistas, y denunciaba que además de haber perdido la noche en el hotel de destin, «nos dijeron que nos iban a dar un vale para cenar (en el aeropuerto) pero terminó siendo un café con dos medialunas».

«A la barra le decían que tenían que bajar. Ellos decían ‘de acá no baja nadie’. Nos hicieron bajar a todos y reprogramaron para las 6.20 de la mañana. otro vuelo, o que los iban a detener, porque retuvieron un avión comercial . viajamos con esta misma gente«, informes.

Flybondi informó, sin embargo, que los «asiento del pasajero identificado como disruptivo no volvió a someterse al avión. Puede ser que otros hinchas lo hayan hecho».

Fuentes de la operaria del Aeropuerto confirman la situación en Clarín. «Varias personas no acataban las indicaciones de la tripulación, además realizaban insultos hacia ellos, eran algunos hinchas de Tigre».

Según explicó Flybondi, en la industria aerocomercial existe un protocolo de seguridad para lo que se lo denomina «pasajeros disruptivos».

«Son aquellos pasajeros que no respetan las normas ya sea en los aeropuertos o a bordo de los aviones o que no siguen las instrucciones de los miembros de la tripulación y así perturban el orden».

Frente a estas situaciones, la aerolinea debe identificarlos y no permitir el embarcar, ademas una denuncia policial ante PSA.

“Estas acciones se toman para proteger a los pasajeros ya la tripulación de cualquier acto de violencia o malestar que la persona disruptiva pueda generar, como también poner en riesgo la seguridad operativa”, concluyó yen.

Desde la cuenta de Twitter de la hinchada de Tigre (@JuntoaTigre) minimizar el tema. Sin hacer mención a los insultos en el avión, comunicaron que los simpatizantes ya estaban en Brasil para animar al equipo en el estadio Morumbi en el partido contra el San Pablo.

PD

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